Este fin de semana decidimos viajar a Chinchón, un pintoresco pueblo de la Comunidad de Madrid que combina historia, gastronomía y un ambiente tradicional que nos transporta a otra época. Con su famosa plaza mayor, su gastronomía castellana y su riqueza cultural, Chinchón nos conquistó desde el primer momento.
Un Paseo por su Plaza Mayor
Al llegar, nos dirigimos directamente a la Plaza Mayor, el símbolo indiscutible del pueblo. Con su forma irregular y rodeada de edificios con balcones de madera pintados de verde, esta plaza es una de las más bonitas y auténticas de España. A lo largo de la historia ha servido como mercado, escenario de festejos, corridas de toros e incluso plató de cine. De hecho, aquí se han rodado películas con estrellas como Orson Welles.
Sentarnos en una de sus terrazas para tomar un café y observar el ambiente fue el mejor inicio para nuestra visita.
Historia y Cultura en Cada Rincón
Desde la plaza, subimos hasta la Iglesia de Nuestra Señora de la Asunción, un templo con una curiosidad especial: en su interior alberga un cuadro de Francisco de Goya, quien tenía vínculos con Chinchón a través de su hermano, que fue capellán en la localidad.
Muy cerca encontramos las ruinas del Castillo de los Condes, una fortaleza del siglo XV que, aunque ha sufrido el paso del tiempo, sigue siendo un punto clave para admirar las vistas del pueblo.
Otro punto de interés es el Convento de San Agustín, hoy convertido en Parador Nacional, y la Torre del Reloj, que curiosamente es una iglesia sin templo, pues el resto del edificio fue destruido durante la Guerra de la Independencia.
Gastronomía: Sabores de la Tierra
Chinchón es famoso por su gastronomía, y no podíamos irnos sin probar algunos de sus platos más tradicionales. Nos decidimos por el cordero asado y el cochinillo, dos especialidades castellanas que, acompañadas de un buen vino de la región, nos hicieron disfrutar aún más de la visita.
Por supuesto, no podía faltar el producto estrella del pueblo: el anís de Chinchón. Visitamos una de las destilerías locales para conocer su proceso de elaboración y probar una copa de este licor con tanta historia.
Naturaleza y Vistas Panorámicas
Para terminar el día, dimos un paseo por los alrededores del pueblo, donde se pueden encontrar rutas de senderismo que atraviesan campos de olivos y viñedos. Desde algunos miradores, se pueden obtener vistas espectaculares de Chinchón y su icónica plaza.
Un Destino con Personalidad Propia
Chinchón es mucho más que una excursión desde Madrid; es un lugar con carácter, historia y una atmósfera que invita a disfrutar sin prisas. Su mezcla de patrimonio, gastronomía y tradiciones lo convierte en un destino imprescindible para quienes buscan una escapada con encanto.
Nos marchamos con la sensación de haber descubierto un rincón único, pero con la certeza de que volveremos. ¡Hasta pronto, Chinchón! 🚗✨
